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EN PARTE YA NOS ESTABAMOS ACOSTUMBRANDO A UN CIERTO TIPO DE "SUICIDAS", QUE CARGADOS DE RABIA CONTRA EL MUNDO OCCIDENTAL O CONTRA QUIENES COLABORAN CON ÉSTE, Y QUE YA SEA POR MOTIVOS NACIONALISTAS O RELIGIOSOS HACEN ESTALLAR SUS CINTURONES DE EXPLOSIVOS AUTOINMOLÁNDOSE Y ARRASANDO A QUIENES LES TOQUE QUEDAR CERCA.
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Así también las noticias del día a día nos han acostumbrado a los suicidios de carácter individual motivados por problemas personales. Sin embargo, hay pocos recuerdos y registros de un occidental que furioso se suicide arrastrando consigo a sus compañeros de trabajo y a toda una tripulación incluyendo niños recién nacidos, como consecuencia de una profunda rabia y frustración debido a la imposibilidad de poder seguir haciendo lo que era su motivo de vida : Pilotear un avión de pasajeros.
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Cierto es que son o han sido muy pocos los que lo han hecho manejando un avión de pasajeros, quizás debido a los férreos controles de las empresas de aviación. Pero, ¿serán también tan pocos los casos en el campo de los choferes de buses o de otros medios de transporte que enojados con el mundo hayan estrellado sus máquinas contra postes u otros vehículos?.
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Y en el caso de naciones o de grandes o pequeñas empresas, ¿ no se dará también el caso de gobernantes que hayan decidido dar batallas suicidas con tal de poder seguir dándose el gusto de gobernar ?.
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La pasión de un Napoleón por gobernar el mundo a toda costa, sin importar el precio en vidas humanas y sacrificios, no sólo lo lleva a la más disparatada de las invasiones de todos los tiempos, a la que marchó llevando consigo casi un millón de soldados y de los que regresaron aproximadamente 50.000.-
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Gobernar o morir, parecía decir en sus sueños o delirios.
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O, quizás parodiando lo anterior, el joven piloto alemán podría haber dicho : volar o morir.
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Quizás estas pasiones desorbitadas y excluyentes no sean tan extrañas o raras en la especie humana y sólo nos sorprenden cuando se rompen las barreras que controlan esas ansias inconmensurables.
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¿ No será también el caso de esos empresarios o políticos que en estos días han quedado desnudos ante la luz pública, los que movidos por un apetito incontralable de poder o de riqueza, sacrifican el esfuerzo de sus vidas y arrastran a la ruina a sus familiares y a cientos o miles de personas que indefensos dependen de ellos, al igual que los pasajeros del avión alemán ?.
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Parecieran decir con sus hechos, o me dejan gobernar y hacer lo que yo quiera o todos se mueren conmigo.
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Mirado este asunto desde este común denominador, pareciera que este hecho trágico no es algo tan singular. Si no, un conjunto de hechos que se expresan de variadas y diversas formas según las contingencias personales.
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Esta historia se parece a la del niño dueño de la pelota de futbol, que si no lo dejaban ser el capitán del equipo o meter los goles, se llevaba la pelota para su casa dejando a todos pateando piedras y él enfurruñado jugando sólo con su pelota.
ResponderEliminarLos niños mal criados a los que los padres los acostumbran a hacer lo que se les da la gana, al final terminan transformándose en pequeños o grandes dictadores, sin ninguna capacidad para resisitir la frustración.
ResponderEliminarNuestro "niño", ya no cambiará, aceptémoslo.
ResponderEliminarLa única alternativa es erigir nuevos liderazgos para el futuro, sanos, académicos y no traumados con el pasado.
El problema de nuestro "niño", es que lo taimado, mañoso y soberbio no se la ha quitado nunca.
EliminarParece que le faltaron una buenas nalgadas cuando era un niño más chico. Ahora ya es demasiado tarde para corregirlo.
Si podemos hacer que otros "niños", malulos, porfiados y mimados, se le aparten.
Conocen la hisforia del espartano Leonidas???. Se parece mucho sobre todo a LP y su regalon el clon de avendaño
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