UN ANÁLISIS CRÍTICO DE LAS REFLEXIONES DEL DIRECTOR DE RR.NN.II. DE LA UTEM

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DISCREPANCIAS CON CONTENIDOS DE CARTA DE DIRECTOR DE  RELACIONES  NACIONALES  E   INTERNACIONALES  A  COMUNIDAD

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Dado que resulta algo extraño que en una carta tan corta se introduzca tantos errores conceptuales un académico que ostenta el altísimo cargo de Director de Relaciones Nacionales e Internacionales de una universidad estatal, América hacer el esfuerzo de analizarla críticamente, pues de estos errores puede surgir una errónea  dirección estratégica universitaria.

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Para este efecto, seguiremos el orden de exposición del Sr. Director, en lugar de analizarlos según su importancia o gravedad.

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LEER CARTA EN : BLOG/CARTA DIRECTOR RR.NN.II. UTEM

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       PRINCIPALES  ERRORES CONCEPTUALES

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1.- Acreditación de carreras y calidad :  "Ello implica el reconocimiento de la sociedad en su conjunto, a la calidad de sus currículum, de sus procesos formativos, y, por cierto, de sus directivos, académicos, funcionarios, estudiantes y titulados. (De párrafo N* 2).

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Al respecto cabe señalar que los expertos en acreditación discrepan del vínculo entre calidad y acreditación. Para nuestra de ello se puede leer a : Luis Riveros, CEPPE-UC, Carlos Lorca entre otros. (VER NOTA PIE PÁGINA).

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2.- Porcentaje de carreras acreditadas : "Cercana al 50%" .

Si se toma en consideración todas las acreditadas, se alcanza al 39%. Y si se agrega Bibliotecología, se llegará al 42%.

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3.-  Combinación maravillosa de la sabiduría de los "padres y madres fundadoras con el ímpetu juvenil aseguran .... .  

Lamentablemente, nos basta recordar que esa maravillosa combinación, hace unos 15 años atrás nos llevó a uno de los peores desastres universitarios estatales del país, para poner en duda esa hermosa profecía.

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4.-  Explotación de intercambio de académicos mediante pasantías y profesores visitantes.  

Aunque ello no es malo en si mismo, todo indica que la Utem debiera en primer lugar hacer un esfuerzo serio para contratar nuevos académicos con auténtica experticia y currículum en investigación.

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5.- La Utem es nuestra.  La construímos entre todos.

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Quizás al autor le faltó agregar la palabra "responsabilidad" y su frase habría quedado bastante mejor : "La Utem es nuestra responsabilidad".   Así se evitaría caer en contradicción con el Sr. Rector, quien hace muy pocos días decía Urbi et orbis  que la Utem era del Estado y que este debía financiarla. 

Quizás, de errores como éste han surgido tantos problemas de gestión. 

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6.- Como último punto, el penúltimo párrafo se refiere sin nombrarlos a las instituciones que se han aprovechado del prestigio de la Utem y han disfrutado por 40 años de esos beneficios.

Bueno sería que aclarará esos conceptos y la forma como las competirá denodadamente.

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CALIDAD VS. ACREDITACIÓN : OPINIONES
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1. Luis Riveros :  “Hemos fallado en crear una cultura de calidad, de modo que ésta sea algo inherente a la educación. Sólo hemos logrado establecer un sistema de acreditación que le da formalidad al sistema”.

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2.- CEPPE :  Toda esta maquinaria de acreditación exhibe un problema grave: no logra entregar indicadores reales de calidad de cada una de las universidades a los postulantes. 

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No miden calidad. Y nadie lo hace. A pesar de que, como lo explican los investigadores del CEPPE, hoy la calidad es cada vez más relevante frente a las carencias que han quedado en evidencia en la discusión pública. (Martín Bascopé, Macarena Domínguez y Lorena Meckes)

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4.- Carlos Lorca :  Ellos son los clientes, ponen las condiciones y también pueden rechazar a un evaluador.

Respecto a la acreditación de carreras, la universidad escoge con qué agencia quiere acreditarse y paga alrededor de $8 millones por el proceso, estableciendo una relación de cliente – empresa, en vez de regulador – regulado.

Se estableció, por ejemplo, que éstas en conjunto con la CNA podían escoger a los evaluadores de su funcionamiento. Y si una universidad no estaba conforme con los profesionales que le habían tocado, podía impugnarlos hasta tres veces. 

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Si el fallo sobre la acreditación institucional resultaba desfavorable, una casa de estudios podía apelar ante la misma CNA y luego, si volvía a perder, podía recurrir al Consejo Superior de Educación. 

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