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A POCOS DÍAS DEL INICIO OFICIAL DE LAS ACTIVIDADES INSTITUCIONALES EN LA UTEM Y DESPUÉS DE UN MERECIDO DESCANSO, LA COMUNIDAD ACADÉMICA, DE ACUERDO A LA NATURALEZA DEMOCRÁTICA DE LA INSTITUCIÓN, ESPERA QUE LOS CANDIDATOS QUE POSTULAN AL CONSEJO SUPERIOR DEN A CONOCER SUS PROPUESTAS RESPECTO AL EJERCICIO DEL CARGO QUE ESPERAN SERVIR CON CLARIDAD Y PRECISIÓN.
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EN DESARROLLO
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¿Ha existido en la UTEM algo parecido a una cultura democrática?
ResponderEliminarCreo que no, ni con el Sr. Avendaño ni menos con el Sr. Pinto, los hechos hablan por si solos. En la actualidad, el Rector de la UTEM expulsó y/o persiguió a sus opositores y ha tratado insistentemente de manipular el padrón de votantes, incluso, dejando fuera a los académicos jornada parcial.
EliminarSr. Editor
ResponderEliminarDisculpe que insista, pero me parece que es importante para la comunidad universitaria saber cuál fue el grado de participación de los Ex Consejeros Superiores (en particular de los que ahora buscan reelegirse),en el otorgamiento de las plantas académicas sin concurso público impugnadas por la Contraloría General de la República. Asimismo, es necesario saber cuál es, en la actualidad, la situación contractual de los académicos que aceptaron las mencionadas plantas. Un mínimo de transparencia democrática, indica que estas ex autoridades debieran pronunciarse frente a tan delicada materia, mas aun si pretenden conducir los destinos de la UTEM por un nuevo período.
Dificil que todos los consejeros puedan responder. Uno de.ellos recibio una de las plantas truchas otorgadas por el rector y rechazadas por la contraloria general.
EliminarInsistimos, la calidad de ACADEMICO, no sólo depende de un decreto de nombramiento, de un contrato o de un cuanto hay de postgrado, post-titulo, etc., etc.,
ResponderEliminarEs una estatura ética, que ennoblece al que la ejerce y que se preserva aun cuando ya no se haga docencia en aulas.
Por eso, quienes se dicen académicos, antes que cultivar su disciplina e instruir sobre ella, deben cuidar que la conducta personal que exhiben a sus alumnos, sea para estos un ejemplo de honestidad y de generosa entrega a un quehacer, también desempeñado por un humilde carpintero de Galilea, llamado por sus discipulos "El Maestro".