Junto con preparar cambios a la reforma a la educación superior, el Mineduc está analizando qué modificaciones le hará al Crédito con Aval del Estado (CAE). Las últimas semanas, las críticas a este mecanismo han escalado, sobre todo después de que el presupuesto 2017 mostrara que se destinarán más de $700 mil millones para "comprar" las deudas que tienen beneficiarios con la banca.
La ministra Adriana Delpiano ha adelantado que el primer trimestre del próximo año se presentará un proyecto que modificará el CAE, para que este se asemeje más al Fondo Solidario (ex crédito universitario).
Sin embargo, este préstamo -que es administrado por las universidades del Consejo de Rectores (CRUCh), tiene una tasa de interés del 2% y se comienza a cobrar a los dos años de egreso- también presenta problemas de reembolso.
Según un informe enviado al Senado por la jefa de planificación del Mineduc, Vivien Villagrán, el año pasado las universidades recuperaron cerca de $85.930 millones de los que el Estado prestó a los estudiantes.
El monto podría considerarse bajo, teniendo en cuenta que este año el CRUCh publicó el listado de morosos, con una deuda superior a los $533 mil millones.
El rector de la UC del Maule, Diego Durán, asegura que el cobro del fondo depende de varios factores. Y añade que gracias a mecanismos de cobranza que han instalado en su universidad, han recuperado desde $800 millones a $1.250 millones cada año.
Además, Durán, quien también es vicepresidente alterno del CRUCh, recuerda que cuando se anunció la gratuidad, "una de las primeras manifestaciones que hubo fue que hubiera un perdonazo para todos". Y en ese contexto, "hay mucha gente, sobre todo en universidades estatales, que ha dejado de pagar, porque considera que la gratuidad también debió haberlos abarcado. Entonces, en función de lo que se podría recuperar, hoy ha habido una merma, porque la gente no está llana a cancelar este crédito".
Respecto del rol que cumple el Mineduc en la cobranza, la División de Educación Superior señaló que eso está delegado "en los administradores de fondo de las distintas universidades, quienes son supervigilados y fiscalizados por la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS)". Y sobre la deuda total del Fondo Solidario, indicó que "la situación financiera de cada una de estas instituciones puede analizarse en sus Estados Financieros, los cuales pueden ser solicitados a la SVS".
Los ajustes
"Ojalá (el CAE) no se parezca al Fondo Solidario, precisamente por el problema de financiamiento crónico que tiene", afirma Andrés Bernasconi, experto en educación de la U. Católica de Chile.
Según el académico, "el problema central es que las universidades no son buenas acreedoras; muchas de ellas lo hacen mal o piensan que no es su obligación cobrar a los estudiantes".
Bernasconi sugiere que si se saca a la banca de la administración del CAE, se debería crear una agencia: "Tendría que ser una corporación autónoma, probablemente con directorio y administración profesional".