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RESULTA DIFÍCIL ENTENDER Y ACEPTAR QUE EL SISTEMA EDUCACIONAL EN PLENO SIGLO XXI PUEDA FUNCIONAR EN FORMA EFECTIVA O PRODUCTIVA SIN UN MÍNIMO DE APLICACIÓN DE UN CIERTO DARWINISMO SOCIAL.
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PAULA NARVÁEZ DEFIENDE MODELO INCLUSIVO:
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EL MERCURIO.COM/MODELO EDUCACIONAL INCLUSIVO/NARVAÉZ/
RESULTA DIFÍCIL ENTENDER Y ACEPTAR QUE EL SISTEMA EDUCACIONAL EN PLENO SIGLO XXI PUEDA FUNCIONAR EN FORMA EFECTIVA O PRODUCTIVA SIN UN MÍNIMO DE APLICACIÓN DE UN CIERTO DARWINISMO SOCIAL.
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PAULA NARVÁEZ DEFIENDE MODELO INCLUSIVO:
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EL MERCURIO.COM/MODELO EDUCACIONAL INCLUSIVO/NARVAÉZ/
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Liberales defienden selección escolar:
Liberales defienden selección escolar:
Señor Director:
Creer que el derrumbe de los liceos emblemáticos se debe a un método de (no) selección que no los tocó es una bobería descomunal o un caza-bobos, pero para bobos descomunales. ¿Hemos cometido tamaña tontería? La subsecretaria de Educación piensa que sí. ¿Qué dijimos? Que la Ley de Inclusión los "sentenció a muerte", que esto "recién comienza" y que "se creó un clima que hizo parecer como vergonzante la existencia de liceos selectivos". Así, se equivoca la autoridad por partida doble: lee mal y no se hace cargo del drama de los emblemáticos.
Dijo la señora Quiroga: "Una de las principales bases de los liceos de excelencia es la selección... Nuestra intención es que en un plazo razonable no haya selección" (10 de octubre de 2013). Y el ministro Eyzaguirre: "Ningún colegio, incluidos los liceos como el Instituto Nacional, podrá elegir a sus alumnos..." (18 de abril de 2014), y "...a la larga la selección es un espejismo, porque es arropar a unos pocos para dejarle los pies desnudos a la mayoría" (23 de abril de 2014). En ese clima, profesores y alumnos que se sentían parte de la solución descubrieron ser parte del problema. Es decir, del mérito a la culpa.
A esto se suma el ranking, que ya opera. Orgullosos graduados de los emblemáticos descubrieron que un colegio mediocre hubiese sido mejor. La directora del Carmela Carvajal lo vio venir entonces: "¿Qué pasaría en Chile -advirtió- si los mejores liceos públicos se derrumbaran?... Las familias no confiarían en la educación pública" (29 de agosto de 2014). Los estudios la avalan: "Los establecimientos.... emblemáticos se ven más impactados en forma negativa al incrementarse la ponderación del ranking de notas" (Larroucau, Río, Mizala, 2015).
Tercero: los paros. No surgen del azar. Tienen líderes y responsables. Han sido consubstanciales a una cultura política que apuesta a la movilización confrontacional y populista (Laclau, Mouffe). Ahora sabemos quiénes fueron sacrificados: jóvenes con talento y pocos recursos que necesitaban ir a clases para poder entrar a la carrera y universidad que soñaban.
Las capas dirigentes se cierran al mérito y se abren más a la cuna. En siete años, de no haber cambios, aún sin paros, los resultados de los emblemáticos no habrán mejorado. El derrumbe estaba programado. La subsecretaria lo sabe. Hace dos años escribimos: "Confiamos en que la Presidenta Bachelet, que se educó en el Liceo 1... proteja y potencie a los liceos emblemáticos. No puede pasar a la historia como quien destruyó las instituciones educacionales más sobresalientes que haya creado Chile" ("El Mercurio", 9 de septiembre de 2014).
Arturo FontaineUniversidad Diego Portales y Universidad de Chile
Sergio Urzúa
Universidad de Maryland y Clapes-UC
Creer que el derrumbe de los liceos emblemáticos se debe a un método de (no) selección que no los tocó es una bobería descomunal o un caza-bobos, pero para bobos descomunales. ¿Hemos cometido tamaña tontería? La subsecretaria de Educación piensa que sí. ¿Qué dijimos? Que la Ley de Inclusión los "sentenció a muerte", que esto "recién comienza" y que "se creó un clima que hizo parecer como vergonzante la existencia de liceos selectivos". Así, se equivoca la autoridad por partida doble: lee mal y no se hace cargo del drama de los emblemáticos.
Dijo la señora Quiroga: "Una de las principales bases de los liceos de excelencia es la selección... Nuestra intención es que en un plazo razonable no haya selección" (10 de octubre de 2013). Y el ministro Eyzaguirre: "Ningún colegio, incluidos los liceos como el Instituto Nacional, podrá elegir a sus alumnos..." (18 de abril de 2014), y "...a la larga la selección es un espejismo, porque es arropar a unos pocos para dejarle los pies desnudos a la mayoría" (23 de abril de 2014). En ese clima, profesores y alumnos que se sentían parte de la solución descubrieron ser parte del problema. Es decir, del mérito a la culpa.
A esto se suma el ranking, que ya opera. Orgullosos graduados de los emblemáticos descubrieron que un colegio mediocre hubiese sido mejor. La directora del Carmela Carvajal lo vio venir entonces: "¿Qué pasaría en Chile -advirtió- si los mejores liceos públicos se derrumbaran?... Las familias no confiarían en la educación pública" (29 de agosto de 2014). Los estudios la avalan: "Los establecimientos.... emblemáticos se ven más impactados en forma negativa al incrementarse la ponderación del ranking de notas" (Larroucau, Río, Mizala, 2015).
Tercero: los paros. No surgen del azar. Tienen líderes y responsables. Han sido consubstanciales a una cultura política que apuesta a la movilización confrontacional y populista (Laclau, Mouffe). Ahora sabemos quiénes fueron sacrificados: jóvenes con talento y pocos recursos que necesitaban ir a clases para poder entrar a la carrera y universidad que soñaban.
Las capas dirigentes se cierran al mérito y se abren más a la cuna. En siete años, de no haber cambios, aún sin paros, los resultados de los emblemáticos no habrán mejorado. El derrumbe estaba programado. La subsecretaria lo sabe. Hace dos años escribimos: "Confiamos en que la Presidenta Bachelet, que se educó en el Liceo 1... proteja y potencie a los liceos emblemáticos. No puede pasar a la historia como quien destruyó las instituciones educacionales más sobresalientes que haya creado Chile" ("El Mercurio", 9 de septiembre de 2014).
Arturo FontaineUniversidad Diego Portales y Universidad de Chile
Sergio Urzúa
Universidad de Maryland y Clapes-UC
Horrible pensar que los liberales aplican las ciencias sociales a la realidad concreta educacional o sea son marxistas. La NM sería entonces socialista utópica o sea idealista sin la solución prática esperada por los que votaron por gratuidad con calidad. NUDO GORDIANO.
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